Si, de eso quería hablar. Del pensamiento mítico que puede meterse en las mentes presuntamente críticas. En todas aquellas frases dignas de oscurantismo que me hacen perder la razón y no me sale refutar con la lógica. Porque, quizá, me sea dificultoso responder con razón a lo meramente emocional...
Presagios, augurios, señales divinas.... ¡Me importan un carajo!
¿Cómo expresarme?
Hay un precepto y se rige por los hechos, lo inteligible. Todo lo demás es mentira, incluso las interpretaciones de lo acontecido. El pasado, los recuerdos, el sentimiento de época, las energías que indican noséqué, todo es intangible, inexistente, y, por lo tanto, luchan por tener un lugar en el tiempo, ese que no admite espacialidades.
Y, en este fallido intento, mi frustración versa en que tirar una patraña que raya el misticismo es simple, casi automático, en cambio, desentrañarla lleva un esfuerzo para el que no estoy capacitada....
Pero, como siempre, lo que más duele no es el aspecto sobre el que tartamudeo, sino sentirme sola e inacompañable..
Raro!!!!
ResponderEliminarEl tiempo es la ilusión, por eso el recuerdo es mentira y la esperanza una distracción. Por eso hay que romper los lazos con el mundo, porque como dije en una entrada mìa: "si no creamos lazos que nos aten a este mundo, no tenemos a quien llorar", ni los recuerdos nos atan a una mentira, ni la culpa nos impide avanzar, es casi imposible, pero solo casi.
Te pediré, a modo de exigencia, una recomendación de textos referidos al tema (?) No ligarse, en un principio, es bastante difícil; desligarse de algo que ya nos afectó, mucho más complejo.
EliminarGracias por leerme y dejar tu comentario.
Te mando un abrazo enorme Fran.
Ann